El melanoma es un tipo de cáncer de piel que surge a partir de unas células en la piel llamadas melanocitos. Éstas son las células que le dan a la piel el color bronceado o moreno característico. Cuando estas células se reproducen de forma incontrolada o se vuelven malignas, pueden invadir tejidos cercanos, afectar los ganglios linfáticos y diseminarse a otras partes del cuerpo. El carcinoma de células de Merkel es otro tipo de cáncer de piel. Es un cáncer de piel más raro pero muy agresivo que, al igual que el melanoma, tiende a hacer metástasis en los ganglios linfáticos y otras partes del cuerpo. Por lo general, suelen lucir como nódulos parecidos a un grano firme en la piel que puede ser del mismo color de la piel, rojizo o un poco morado. Su dermatólogo lo remitió para tener una consulta con nuestro equipo de cirujanos porque, de ser posible, la mejor manera de tratar los melanomas o los carcinomas de las células de Merkel es extirpar el tumor por completo y, además, revisar si el tumor se ha esparcido a algún ganglio linfático cercano. En este video, queremos darle una idea de lo que sucederá y anticiparle detalles sobre el tratamiento. También queremos que sepa que estamos para ayudarle a superar esto y encontrar la mejor forma de abordar su enfermedad.
Una resección local amplia es una operación donde retiramos el tumor, pero también retiramos parte de tejido cercano al tumor que, en apariencia, es normal. Esto es muy importante ya que evita que el tumor regrese. Asegura que retiremos todas las células tumorales la primera vez, y la cantidad de tejido normal que retiremos depende de la profundidad o grosor específico del tumor y conversaremos con usted sobre esto durante su consulta. Durante la consulta, cuando analicemos el informe de histopatología, repasaremos los detalles y a partir de esto haremos recomendaciones acerca de cuánto tejido de apariencia normal necesitaremos retirar además del tumor. Incluso le haremos un dibujo para que sepa qué anticipar y luego hablaremos acerca de las distintas opciones de reconstrucción, ya sea con un injerto de piel, colgajo local o algún tipo de procedimiento en etapas. En general, la biopsia del ganglio linfático centinela se realiza el mismo día que la resección local amplia y que la reconstrucción.
La biopsia del ganglio linfático centinela es un procedimiento que nos ayuda a determinar si el cáncer se diseminó a otras partes del cuerpo. En el caso de un cáncer de piel que involucre la cabeza o el cuello, la biopsia de ganglio linfático centinela nos permite obtener una imagen que puede mostrar o no cáncer. Deberá ir a la clínica de medicina nuclear y allí, el procedimiento del ganglio linfático centinela comienza con una inyección cerca del sitio principal donde está el cáncer de piel. Esto consiste en cuatro pequeñas inyecciones de un marcador alrededor del sitio del cáncer, y este marcador hace el mismo recorrido que haría el cáncer si este se diseminara. El marcador se deposita en un ganglio linfático en particular, el cual se identifica como el ganglio linfático centinela. El ganglio linfático centinela representa el ganglio linfático que tiene el mayor riesgo de tener cáncer diseminado, y después de más o menos media hora, tomamos imágenes con un tomógrafo para identificar qué ganglios linfáticos están iluminados por el marcador. Esto permite al cirujano identificar uno o dos ganglios linfáticos para retirar. Podemos saber con bastante seguridad si ese ganglio linfático tiene cáncer o no. Desde la aplicación de las inyecciones hasta la tomografía, pasarán unos 90 minutos, tiempo que el marcador necesita para desplazarse hasta el ganglio linfático centinela. Lleva 30 segundos tomar la imagen en sí. Anticipe que la duración total del procedimiento del ganglio linfático centinela sea de alrededor de una a dos horas.
Una vez que tenga programada la cirugía, la clínica de anestesiología se comunicará con usted para programar una consulta. Ellos repasarán con usted una lista para asegurarse de que esté preparado para la operación. Lo llamarán del centro quirúrgico el día anterior a la operación para confirmarle la hora y el sitio en que deberá presentarse. Dependiendo del tipo de cirugía que tenga programada, puede que también le programen una cita en medicina nuclear el día de la cirugía por la mañana. El personal de traslado del centro quirúrgico lo llevará a radiología para esa cita.
La resección local amplia y la biopsia del ganglio linfático centinela es realizada por un cirujano especializado en melanomas y generalmente la reconstrucción también la hace el mismo cirujano. Estos procedimientos por lo general se realizan bajo anestesia general. Para confirmar que es seguro darle anestesia, tendrá una consulta preanestésica con bastante anticipación a la cirugía, y el día de la cirugía conocerá al anestesiólogo quien administrará la anestesia. También se reunirá con usted el personal del quirófano además del cirujano con el que se reúne en la clínica. También se reunirá con usted el personal de medicina nuclear, quienes le aplicarán las inyecciones con el marcador, así como el personal de enfermería que lo atenderá durante la operación. Después de esto, lo trasladarán al quirófano. Durante la operación, estará bajo anestesia general; no sentirá ni recordará la cirugía. La extirpación del ganglio linfático centinela consiste en una incisión de aproximadamente una pulgada ya sea en la mejilla o en el cuello. Esto se hace al mismo tiempo que se hace la cirugía para retirar el cáncer. Ahora bien, hay nervios específicos cerca de la mejilla y del cuello que es importante tener identificados para preservarlos. Estos nervios controlan los movimientos del rostro y, en ocasiones, de los hombros, pero somos cuidadosos de solo retirar los ganglios linfáticos. En raras ocasiones, el marcador que se inyecta en el cáncer de piel no se desplaza o no identifica ningún ganglio linfático centinela. En estos casos, no podemos retirar el ganglio linfático centinela ya que no hay ninguno identificado. Si esto ocurre, haremos un seguimiento de las zonas de la cabeza y del cuello con estudios por imagen de rutina luego del procedimiento. Una vez realizada la cirugía, se recuperará de la anestesia en la unidad de recuperación. El ganglio linfático se envía a analizar por un histopatólogo y luego de aproximadamente una semana estarán listos los resultados finales.
El procedimiento del ganglio linfático centinela nos proporciona información acerca de su pronóstico, lo cual es importante para el tratamiento del cáncer. Básicamente, nos permite saber si el cáncer se diseminó o no con alto grado de certeza. El procedimiento en sí no es un tratamiento, sino que es un método para obtener información importante que nos indica si es necesario hacer tratamientos adicionales.
Al igual que con cualquier otro procedimiento, la biopsia del ganglio linfático centinela conlleva ciertos riesgos. El riesgo principal de este tipo de procedimiento es tener alguna infección. Puede que tenga hinchazón cerca de la incisión que por lo general se puede tratar de forma tópica. Si nota que tiene hinchazón o enrojecimiento, lo primero que debe hacer es avisarle a su médico. Puede que le recomendemos aplicarse un tratamiento tópico en la zona. Si la zona parece estar más afectada que una infección leve, puede que le recetemos antibióticos por vía oral. Otro riesgo del procedimiento es que se le forme un seroma. Un seroma es una pequeña acumulación de líquido que, posteriormente el cuerpo absorbe de forma natural. Se puede acumular en el espacio de la incisión quirúrgica. Si esto ocurre, por lo general desaparece por sí solo sin necesidad de hacer ningún tratamiento. En caso de tener un seroma extenso, puede que tengamos que hacer un pequeño procedimiento para drenarlo. Si nota que tiene hinchazón y aumento de tamaño cerca de la incisión, el primer paso es avisarle a su médico. Hay un riesgo menor de tener rigidez o limitación de movimientos en la zona de la cirugía, lo cual suele estar relacionado con el proceso natural de cicatrización. Estos síntomas suelen desaparecer de forma espontánea en una o dos semanas. Hay un riesgo de que le quede una cicatriz en el sitio de la incisión. Este riesgo es inevitable, pero hay ciertas cosas que se pueden hacer para minimizar el aspecto de la cicatriz. Es importante evitar que la cicatriz se exponga al sol. Lo segundo es aplicar una pomada para permitir que esa zona se cure y lo tercero sería hacerse masajes en la zona para optimizar la cicatrización. Si el cirujano decide inyectarle un tinte adicional durante la intervención, puede que orine de color azul después del procedimiento. Esto no es para preocuparse y debería resolverse varios días después de la cirugía.
A medida que se recupera de la anestesia, puede que se despierte con la sensación de cansancio y que esté olvidadizo. Estos síntomas suelen ser muy agudos y desaparecerán antes de que le den el alta del hospital. Puede que tenga una leve disminución del juicio y de los reflejos por varios días después del procedimiento. Usted tendrá una consulta de seguimiento con el médico aproximadamente a la semana del procedimiento. Para ese entonces, los resultados de histopatología deberían estar listos, y tendrá la consulta con el médico acerca de cuáles son los siguientes pasos para el tratamiento.
Le cubriremos la incisión con un pegamento llamado Dermabond®. Este quedará adherido a la piel por unos siete o diez días. El pegamento se irá desprendiendo poco a poco por sí mismo. Las instrucciones con respecto a la ducha y el cuidado de la herida son las mismas que se dan para el procedimiento de resección local amplia. Al igual que con la resección local amplia, es normal tener una leve hinchazón en la herida y entumecimiento en la piel alrededor de la incisión que suelen desaparecer con el tiempo. Limite la actividad física por una semana a partir de la cirugía: no levante cosas, no se agache ni haga esfuerzos. No levante nada que pese más de 10 libras ni haga ejercicio por una semana. No hay restricciones con respecto a lo que puede comer. Reanude su dieta normal. Tome los medicamentos para el dolor bajo receta durante los primeros días después del procedimiento según los necesite. Después de eso, podrá dejar pasar más tiempo entre las dosis. Puede tomar ibuprofeno (dos Advil® o el equivalente cada 8 horas) además del medicamento bajo receta para ayudarle a bajar el dolor a partir del día siguiente de la cirugía. Llame si comienza a tener alguna secreción, más enrojecimiento o bastante hinchazón en cualquiera de los sitios de incisión, o si tiene fiebre de 101° Fahrenheit.
Cuando tenga la consulta con el médico después de la cirugía, repasaremos los resultados de histopatología. Según los resultados de la biopsia de los ganglios linfáticos centinela, definiremos cuáles son los siguientes pasos con respecto a su tratamiento. Dependiendo de los resultados finales de histopatología, hay disponibles distintos ensayos clínicos para averiguar cuál sería el tratamiento ideal para el cáncer en su caso. Creo que la biopsia de los ganglios linfáticos centinela nos proporciona una opción mínimamente invasiva para obtener información vital e importante que guiará el tratamiento del cáncer. Anteriormente, contábamos solo con cirugías más invasivas para obtener la misma información que hoy en día podemos obtener con la biopsia de los ganglios linfáticos centinela. Incluso pacientes con tumores avanzados son curables si se tratan los tumores de forma apropiada. La clave está en encontrar la combinación adecuada de tratamientos para su caso en particular. Quiero asegurarle que haremos lo mejor para cuidar de usted. Entendemos que recibir un diagnóstico de cáncer es una experiencia transformadora que cambia la vida y estaremos junto a usted para acompañarlo en este proceso.